DRAGON BALL 2nd EPOQUE (Fan- Fic): Prólogo


Os traigo este fantástico Fan- Fic creado por mi amigo HECTOR 4 y basado en Dragon Ball. A modo de novela, continúa la historia que nos sitúa cronológicamente tras lo ocurrido en Dragon Ball GT.
Cada semana publicaré un capítulo, aunque, para los que no se puedan esperar, podéis encontrar la obra completa aquí

DRAGON BALL 2nd EPOQUE:
PRÓLOGO:

Cuenta la leyenda que en los tiempos de antaño existían unas esferas mágicas de un poder incalculable, que aquel que consiguiera con esfuerzo reunir las siete, podría obtener el deseo que se le antojase de manos de un gran dragón sagrado. A lo largo de los años estas esferas fueron utilizadas por muy diversas personas, y no siempre para fines adecuados. En un principio, las Dragon Balls, fueron creadas para ayudar a los seres humanos cuando realmente necesitaran de su ayuda divina, pero la ambición de las personas y el uso continuado de éstas hizo que las esferas se recargaran de energía negativa, dando lugar a la mayor amenaza que jamás conoció el universo; siete dragones malignos aparecieron para castigar ese uso abusivo. Pero hubo un guerrero que consiguió demostrar su enorme valor y su gran y puro corazón. Este guerrero hizo un trato con el dragón sagrado y sacrificó su vida a las Dragon Balls, no obstante su destino siempre había estado íntimamente ligado a las mágicas bolas. Así, el legendario guerrero Son Gokuh entregó su espíritu para proteger por siempre las esferas, hasta que llegara el día en que la gente volviera a demostrar que, en verdad, su esfuerzo merecía ser recompensado con una nueva aparición de las siete bolas, una aparición que solo debería ser símbolo de una pequeña esperanza si de verdad fuera necesaria...
El tiempo pasó, y los años donde la Tierra se veía inmersa en grandes amenazas y peligros quedaron en el olvido, solo mencionadas en los libros de historia. La humanidad había demostrado sus ganas de vivir y su capacidad de resurgir cual ave fénix. Las Dragon Balls ya se habían desprendido de toda su energía negativa, había llegado el momento de que la tregua marcada por el dragón divino Shenron acabase...
En una especie de limbo nebuloso, en un plano de existencia mas allá del mundo de los vivos y del otro mundo, el guerrero legendario conocido como Gokuh dormía sobre un lomo verde escamoso:
-¡Gokuh, despierta!.
Una voz profunda y unísona resonaba en toda la dimensión, despertando a un siempre apacible Son Gokuh de aspecto adulto:
-Uuuuaaaah, ¿hum?, ¿qué pasa Shenron? ¿He dormido demasiado esta vez?-pregunta el extrañado guerrero, notando en esa voz un tono distinto, un tono que le recordaba al pacto divino que hizo tiempo ha.
Las otras veces que Gokuh había despertado encontrándose en ese limbo tan solo había pedido un permiso especial para echar un vistazo a su querida Tierra, pues nunca había dejado de velar por los suyos, y Shenron casi nunca hablaba o simplemente decía "ve, Gokuh"...pero esta vez era distinto:
-¡Ha llegado el momento!.-volvió a resonar la voz.
Gokuh intuyó de ipsofacto que las Dragon Balls volvían a estar listas para hacer una nueva aparición en la Tierra.
-Oh, ya veo, Shenron...jeje, ya tenía ganas de volver a llenarme la barriga de verdad.
-¡No, Gokuh, tú ya no puedes regresar...!-vuelve a hablar Shenron, con su grave e impasible tono.
-Ya veo...jeje, si, tienes razón, ése ya no es mi lugar...-dice Gokuh, resignándose de inmediato a su destino.
-Ha pasado mucho tiempo...bueno, pues vamos allá...
-...¡Si!...-resuena.
De repente el cuerpo de Gokuh comienza a brillar y a flotar en el aire. De diversas partes de su cuerpo comienzan a salir, resplandecientes, las siete esferas del dragón. Éstas se sitúan formando un círculo sobre la cabeza de nuestro guerrero y, al mismo tiempo, Shenron se convierte en un haz de luz que recubre las bolas. Shenron vuelve a formar parte de las esferas.
-Bueno, ya está, ahora solo queda que os disperséis de nuevo por la Tierra.-dice Gokuh dirigiéndose a las relucientes Dragon Balls.
Pero en ese momento Gokuh, alertado, capta un tremendo ki belicoso y muy maligno:
-¡¿Qué?!¡¿Quién eres?!
De entre la neblina nebulosa empieza a descubrirse una silueta esbelta. Conforme aparece de entre las nubes su cuerpo comienza a tomar forma y color. Ante Gokuh aparece un ser humanoide, con un largo cabello plateado que hondea en el aire, unas orejas puntiagudas, atravesadas por sendos y extraños pendientes, su piel pálida como la nieve y su cara destacando una siniestra mirada llena de odio y codicia, una mirada demoníaca. Sus ropas, de aspecto siniestro, tapadas casi en su totalidad por una capa de aspecto oscuro y diabólico que recubre todo su cuerpo. En su mano derecha porta un báculo negro y retorcido.
-¡He dicho que quién eres! ¡¿Cómo has llegado hasta aquí?!-Gokuh no sale de su asombro.
-Esas bolas son mías, guerrero legendario Gokuh.-habla el siniestro y oscuro ser.
-¡¿Qué?! ¡¿Cómo sabes mi nombre tú?! ¡Yo a tí no te conozco de nada, que recuerde!
-Yo se muchas cosas, cachorrillo, jejeje.-ríe con un tono burlón y sobrado.
-Me voy a llevar las esferas mágicas. Son de mi pertenencia.
-¡Las Dragon Balls no son tuyas, pertenecen a la Tierra! ¡No vas a llevártelas a ningún lado si yo puedo impedirlo!
-¡JAJAJAJAJAJA!-sus carcajadas llenan el ambiente de un sonido monstruoso.
-Pequeño y beligerante saiyan, tú también me perteneces.
-¿Cómo? ¡Yo solo entiendo que tú no deberías estar aquí, así que vete o yo te juro que...!-grita Gokuh lanzándose contra la nueva amenaza.
En un rápido movimiento el oscuro ser extiende sus brazos, agarrando su báculo con las dos manos. Gokuh llega hasta él pero queda paralizado justo frente al negro bastón. Impasible, el demoníaco ser empieza a pronunciar unas palabras ininteligibles y Gokuh empieza a notar que pierde el control sobre su cuerpo. Gokuh cierra los ojos un instante y cuando los abre se halla rodeado de una intensa oscuridad. Nuestro saiyan no alcanza a pronunciar palabra. Suena la tenebrosa voz del maligno ser, creando un eco que envuelve el oscuro lugar:
-Nos encontramos dentro de tu inexpugnada mente, valeroso guerrero Son Gokuh. Tú y las Dragon Balls me pertenecéis y me ayudaréis a conseguir el control absoluto de las cuatro galaxias.
-Eso ni lo sueñes...-alcanza a decir nuestro saiyan con gran esfuerzo.
-Déjame salir de aquí y pelea limpiamente, ¡aghk!.
-No trates de hablar, guerrero, todo será en vano. Si hablas tan solo conseguirás debilitarte y me harás demasiado fácil el conseguir el control de tu mente. JAJAJA. Veo que eres un ser de gran energía positiva, tu pureza no tiene límites, y cuanto mas puro seas mas podré controlar tu corazón.-de pronto, la voz del nuevo enemigo toma un tono solemne.-Tú que te elevaste desde lo mas bajo hasta mas hallá de la divinidad, Son Gokuh, tú mereces ser mi guardaespaldas personal, así que recuerda bien este nombre, beligerante saiyan, yo soy el amo y señor del universo, ¡el gran hechicero KAARAT!.
Toda la oscuridad que rodea a Gokuh termina envolviéndolo y cubriéndolo de un halo oscuro. Su piel se torna de un color negruzco (mas incluso que en gt, jejeje) y la expresión de su cara toma una forma grotesca y belicosa. De repente todo se torna negro y en esas tinieblas se pierde la pista del saiyan Gokuh y de las Dragon Balls

Comentarios

HECTOR4 ha dicho que…
Uoooh...que pedazo de fic!!! ¿Quién lo habrá hecho? XDDDD...

Muchas gracias, Diego, por colocar mi fic en tu blog!!!
Diego M. Murugarren ha dicho que…
No hay de qué. El fic está muy bien, tanto su historia como redactado. ¡Felicidades!